Introduction
El presente artículo busca mostrar como el concepto de inconsciente colectivo (IC) puede ser de utilidad para comprender los liderazgos políticos de la época actual, la época de la democracia de los públicos. Para ello, nos apoyaremos en el estudio de caso de Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
Perfil político de Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
AMLO, es un político mexicano de izquierda ; que en el desempeño de su cargo como jefe de Gobierno del DF, entre el 2000 y el 2005 ; logró la aceptación de una gran parte de la población, lo que lo convirtió en pieza clave de la política nacional y le permitió construir un liderazgo carismático situacional.
Comenzó su carrera política en el PRI (Partido Revolucionario Institucional), en 1976. Luego, en 1991, y tras haberse dado cuenta de que sus oportunidades de crecimiento en el partido estaban agotadas ; se volvió miembro del recién fundado PRD (Partido de la Revolución Democrática). Partido que apoyó su candidatura para la gubernatura de Tabasco en 1991 y 1994. Tras haber perdido ambas elecciones ; emprendió acciones de protesta. Las más importantes, dos marchas que se desplazaron de Tabasco al Distrito Federal de Mexico.
Posteriormente, AMLO fue presidente nacional del PRD. Ahí, tuvo la oportunidad de proyectar su carrera a nivel nacional. Luego, en el año 2000, obtuvo el cargo de jefe de Gobierno (alcalde) del distrito federal de la ciudad de México . En este puesto adquirió considerable visibilidad pública. Además de utilizar una buena estrategia de comunicación ; promovió políticas públicas en favor de los sectores más necesitados y entretejió una relación cercana y personal con la población, apoyándose en imágenes que la incitaban a identificarse con él.
Su estrategia de comunicacióni tenía varias ventajas : era AMLO quien marcaba la agenda del día. Pudo establecer vínculos con los medios de comunicación. Igualmente, siendo el único dentro de su gobierno que hacía declaraciones, había una versión homogénea de los hechos en el espacio público. Además, le permitió, reforzar la imagen de “austeridad republicana”, que pretendía proyectar. Suplementariamente, promovía la idea que era un político trabajador, al servicio de su pueblo.
AMLO aspiró a toda costa a distinguirse de los otros políticos. Construyó la imagen de un hombre honesto, simple, capaz de ver por los intereses de la gente, sensible a sus necesidades y promotor de programas sociales. Su manera de vestir y de comportarse, su forma de hablar, lo hacían ser percibido como un mexicano “cualquiera”. Convirtiéndolo así, en puente entre los políticos y el pueblo. Representaba al hombre que comprendía las necesidades de la gente y que era capaz de satisfacerlas. Poco a poco, AMLO y la esperanza quedaron entretejidos en el imaginario colectivo.
Como jefe de Gobierno, tuvo que enfrentar, el proceso jurídico del desafuero. En el ejercicio de sus funciones, había desobedecido la orden de un juez. Esto ocasionó que se debatiera si se debía o no quitarle el fueroii. El proceso fue interpretado como un atentado a los derechos políticos de AMLO. De acuerdo con su propio discurso, la cúpula de poder quería evitar que llegara a ser candidato en las elecciones del 2006 a causa de la aceptación que tenía y de que representaba una amenaza para los intereses de las cúpulas. Al momento del desafuero la opinión pública se movilizó a su favor.
Siendo uno de los políticos más populares, en el 2006, la “Coalición por el bien de Todos”, formada por los partidos de izquierda : PRD ( Partido revolucionario democrático) , PT (Partido del Trabajo) y Convergencia ; lo postuló como candidato para las elecciones presidenciales. Todo aparentaba que ganaría. Sin embargo, oficialmente perdió las elecciones. Al conocer los resultados, organizó una movilización, que pronto se convertiría en un plantón, exigiendo el recuento total de los sufragios. Cuando sus seguidores se dieron cuenta que el Tribunal Electoral no se pronunciaría a su favor, decidieron nombrarlo “presidente legítimo”. A partir de entonces, AMLO se volvió el dirigente de un movimiento que se ha ido apropiando de nuevas causas ; en la búsqueda de atraer a nuevos segmentos de la población.
Cabe resaltar, que desde el desafuero, cuando AMLO se consolidó como líder de una porción de la población ; ha establecido con ésta relaciones cercanas y personales. Este ha sido uno de los factores que le han permitido construir su liderazgo. La sensación de cercanía se debe a que ha movilizado, sin explicitarlo, ciertas representaciones albergadas en el inconsciente colectivo mexicano. AMLO ha establecido un tipo de relación con sus seguidores en la que su papel de representante de un grupo, se confunde y trastoca la identidad sus representados. Se comporta como si fuera uno más de entre ellos, dejando simbólicamente de lado su lugar de líder y resaltando los aspectos compartidos.
El liderazgo de los políticos
Este tipo de liderazgo, resulta recurrente en la democracia de los públicos. Esta ; se caracteriza entre otras cosas, por la “personalización” de la política. Los líderes han adquirido una centralidad sin precedentes. Su personalidad, su manera de establecer relaciones y de manejar recursos determinan en buena medida los procesos políticos. Los partidos han sido desplazados por las “personalidades”. Los políticos, se sirven de la estructura, organización y capacidad de movilización de los partidos ; pero manifiestan poca fidelidad hacia ellos. Por otro lado, los ciudadanos desarrollan cada vez menos fidelidad hacia los partidos, pero más hacia las personalidades políticas. Lo que ocasiona que las elecciones no sean la expresión de pertenencia a una clase social, como lo fueron antes, sino de la predilección de cierto candidato.
Los políticos contemporáneos, dividen a la sociedad de manera artificial de acuerdo a lo que consideran puede serles útil para atraer simpatizantes. Proponen principios de identificación basados en : la similitud de posturas, preocupaciones e identidades, entre ellos y la población ; y de diferenciación con otros segmentos y con sus adversarios políticos. Estos principios, dan sentido a las imágenes que se presentan a la población. Ya que las plataformas de los partidos y las propuestas de los políticos han sido suplantadas por imágenes, que buscan atraer y convencer a la gente que cierto político merece su confianza y que comparte suficientes características identitarias con él. Por eso los políticos contemporáneos son ante todo, expertos en comunicación y manejo de medios ; ya que éstos resultan fundamentales para hacerlos personalidades públicas, promover la identificación de la población con ellos y legitimarlos.
Los políticos se sirven de los medios para establecer relaciones imaginarias y simbólicas con sus simpatizantes. Estas se caracterizan por pretender ser personales y cercanas. Los políticos recurren a imágenes “atrapa todo”, capaces de crear un público que se forma respondiendo a las circunstancias y/o a la movilización de ciertas representaciones.
A través del concepto de inconsciente colectivo (IC) se pretenden explorar las representaciones, valores y normas, que permiten a los políticos aglutinar en torno a ellos, a sus públicos. Y así construir sus liderazgos.
El aporte del inconsciente colectivo (IC)
El término de inconsciente fue utilizado por primera vez por los filósofos alemanes de la época romántica. Sin embargo, podemos hallar una primera intuición de la noción en Leibniz, quien criticando la concepción cartesiana de la consciencia ; propone que aunque estamos pensando todo el tiempo, no somos conscientes de todos nuestros pensamientos. Para los filósofos románticos, el inconsciente es la fuerza que dirige al universo y se diferencia de la consciencia humana. Otros filósofos, como Schopenhauer y Nietzsche se ocuparon del inconsciente, sin embargo no nos detendremos en sus concepciones ; pasaremos directamente al psicoanálisis.
Para Freud, el inconsciente es un componente normal de la vida psíquica. Se manifiesta a través de los errores y las lagunas cotidianos ; y el psicoanálisis sería el método ideal para descifrarlo. En cuanto a lo colectivo, Freud se ocupó del asunto en "El malestar en la cultura". Sin embargo, siempre utilizó como modelo de comprensión de la sociedad, el desarrollo individual ; sin establecer diferencias o relaciones entre los dos niveles.
De los discípulos de Freud, fue Jung quien se ocupó del IC. De acuerdo con Jung, el inconsciente es extremadamente dúctil ; y no debe asimilarse únicamente a lo desconocido.
Según Jung, en un nivel más profundo del inconsciente individual existe el IC. En él se concentran los arquetipos, es decir las imágenes arcaicas y universales que conforman el patrimonio de representaciones compartido, producto de la experiencia psíquica de la humanidad. Los arquetipos se manifiestan a través de cualquier forma de representación del imaginario colectivo.
Aunque la noción de Jung ha sido bastante difundida, continua siendo considerada una noción obscura y ha sido duramente criticada.
Algunos investigadores, han realizado esfuerzos para redefinir y utilizar de otras formas el concepto de IC. Entre ellas, y que es la que guía la presente reflexión, está la propuesta por Marcel Maussiii. Para él, el IC es “resultado de la disposición individual para incorporar normas, representaciones y valores elaborados colectivamente, introyectados y que definen la escena de acción social”.iv En principio, éstos son ajenos a los individuos, pero a través de la socialización, se sintetizan e incorporan ; fundamentalmente de forma no consciente. El proceso de incorporación conlleva el olvido de las modalidades de adquisición. Este es una especie de “trampa social”v, que permite el desarrollo de una socialización natural y relajada.
El IC, permite la subsistencia de las instituciones que trascienden a los individuos. Es esencial para el mantenimiento de los grupos ya que en él se aloja lo simbólico. Lo simbólico permite organizar y mediar las relaciones sociales ; mantener las diferencias entre los individuos, ajustando jerarquías y normas con la intención de dar estructura al conjunto.
Marcel Mauss evitó la tentación de hacer del IC, contenido hereditario determinado o estructura de socialización a priori. Para él, es el resultado de la capacidad de los individuos para transformar la actividad de socialización a un plano no consciente.
Como es producto de la interacción, se modifica constantemente y se adapta a las condiciones sociales. Por un lado, esto nos permite salir del vetusto problema de los “entes colectivos” asimilados a los individuos y por otra parte, nos permite trabajar sobre los referentes no conscientes de los grupos que nos interesan. Esto resulta interesante, ya que estos referentes no conscientes son la condición de posibilidad de la eficiencia de los símbolos ; y la movilización de lo simbólico es parte fundamental de la política.
Para poder aprehender el IC, hemos utilizado : la observación participante, entrevistas y el análisis de los discursos de AMLO. No discutiremos a profundidad los problemas a los que nos hemos enfrentado ; sin embargo, bosquejaremos algunos. A través de las entrevistas y de la observación participante buscamos comprender los referentes construidos colectivamente. Nos enfrentamos a los clásicos problemas ocasionados por la presencia de un observador extraño.
Además, suspender la utilización de los propios referentes para comprender los de los otros, no resulta sencillo. No es solución pedir a los individuos que evidencien las razones de su conducta, ya que los discursos no siempre coinciden con acciones y motivaciones ; además trabajamos con el inconsciente, es decir con aquello que los individuos no tienen en la conciencia. La solución adoptada ha sido interactuar por periodos de tiempo prolongados hasta reconocer los marcos utilizados.
Otro problema resulta de la introyección e incorporación individual de las socializaciones. Ya que cada individuo compone sus referentes utilizando partes de los sistemas a los que pertenece, la dimensión subjetiva nunca debe perderse de vista. Tomando esto en cuenta se han realizado entrevistas en las que se incorpora la historia de vida del entrevistado ; esto nos permite comprender el contexto en el que han sido creados los referentes que guían a nuestros interlocutores y que ciertamente influyen en las construcciones colectivas.
Otra dificultad ha sido que la significación de la figura de AMLO se ha modificado a través del tiempo, lo que hace que sea difícil recomponer las creencias de épocas anteriores. Un seguimiento resulta posible ; sin embargo, para los nuevos contactos hemos tenido que utilizar sus propias re-significaciones.
Temas y análisis de los discursos de AMLO
Cruzando los resultados obtenidos en las 42 entrevistas y el análisis de los discursos de AMLO ; buscamos detectar los temas recurrentes, valores y representaciones que permitieron la identificación entre el líder y sus simpatizantes ; así como, el mantenimiento del grupo. Cabe resaltar que aunque el periodo estudiado comprende de marzo del 2005 a julio del 2010 ; hemos tenido que trabajar con imágenes, creencias y representaciones que parecieran venir de otras épocas. Esto se debe a que el IC construye referentes que sobrepasan el tiempo de los individuos ; así, durante las interacciones no es extraño encontrarnos con éstas brechas.
A continuación abordaremos los resultados preliminares de nuestro estudio de caso. Se han intentado encontrar los elementos del IC que permitieron fundar el liderazgo de AMLO. Este se construyo a partir de las imágenes enviadas por dicho político ; e interpretadas por la población utilizando referentes previamente compartidos y los propuestos por AMLO. Estas imágenes además de promover la identificación de una parte de la población con el líder, la convencieron de que era digno de su confianza. Además, demarcaron la identidad de los adversarios utilizando : el discurso movilizado anteriormente por el PRIvi sobre la mexicanidad ; y la división promovida por AMLO entre “ricos y pobres” ; convirtiendo a los ricos en los adversarios.
La pobreza es el estandarte de AMLO, que en México, es la realidad de una buena parte de la población. Además, la idiosincrasia promovida por la religión católica, refuerza las creencias sobre la posición que debe ser asumida por los pobres. Igualmente, existe la herencia de los artistas de los años 40 que se interesaron en ellos y crearon iconos de identificación.
Adicionalmente, AMLO movilizó la impunidad y la desigualdad ante la ley a las que se ve sometida la población. Se mostró como la victima de los grupos poderosos en el proceso del “desafuero”, hermanándose con el grueso de la población que padece el mismo mal.
Por otra parte, conjuntó en él, a la vez la imagen del provinciano y del líder del DF. La gente venida de provincia es considerada popularmente como ingenua ; y el DF es reconocido por tradición como contestatario. AMLO hizo de ambas parte inequívoca de su identidad. Además, al iniciar la campaña para la elección del 2006, asignó a cada región la fuerza, valor, cultura y trabajo que caracterizan a “su pueblo” y se funden con el ideal construido sobre lo que es ser mexicano. Igualmente, movilizó lugares y ritos de la memoria de la izquierda en México, así como su pertenencia a la oposición. Se presentó como un político “anti políticos”, intentando ser la contracara de deshonestidad, corrupción, abuso de poder, clientelismo y falta de compromiso que caracteriza según el imaginario popular a los políticos. Es interesante hacer notar, que AMLO no solamente realizó críticas, e interpretó acertadamente las necesidades de la gente ; sino que también realizó acciones concretas que lo presentaron como el hombre capaz de modificar las situaciones duras a las que se enfrenta una buena parte de la población. Sin embargo, su liderazgo no puede ser comprendido como un liderazgo caudillista, ligado simbólicamente a la figura del “padre” ; sino como un liderazgo al estilo de un “hermano mayor” : a la vez protector, fuerte y experimentado, pero formando parte de la camarilla. Esto podemos verlo en las relaciones, simbólicas e imaginarias, que estableció con sus seguidores ; a la vez cercanas, personales y empáticas, donde pretende comportarse como uno más de entre el grupo.
Por otra parte, como candidato en el 2006 ; prefirió realizar el proselitismo “a la vieja usanza”, de puerta en puerta ; esto como consecuencia de su experiencia en el PRI en los años 70 ; donde los partidos primaban sobre las personalidades políticas. Además de la imagen que había construido como jefe de gobierno ; se valió para la campaña, de la creencia compartida que en el 2010 habría un cambio mayor en el país. Cabe recordar que la lucha de independencia comenzó en 1810 y la de la revolución en 1910. AMLO propuso la revolución de las conciencias que se llevaría a cabo de manera pacífica y organizada durante su mandato. Para las capas de la población inconformes o comprometidas con las causas sociales esta era una solución posible y deseable.
Luego de haber perdido oficialmente las elecciones, el grupo en torno a AMLO se transformó. La identidad de los seguidores se fijó en torno al líder después del plantón, que fue un evento sociológico en toda la extensión de la palabra. Este marcó definitivamente la vida del grupo cristalizando la identidad del “pueblo”. La nueva estructura política que se formó, ha adoptado desde entonces reivindicaciones sociales de todo tipo, buscando atraer nuevos simpatizantes.
Conclusiones
El estudio del liderazgo de AMLO, nos llevó a reflexionar sobre la democracia de los públicos. Esta se caracteriza entre otras cosas por el establecimiento de relaciones cercanas y personales entre líder y seguidores, la personalización de la política, y la importancia de lo simbólico. Para poder descifrarlas hemos utilizado el concepto de IC. A través de éste, se intentaron comprender las representaciones, normas y valores que dan sentido, estructura, jerarquías y referentes al grupo que se formó en torno a AMLO, permitiéndole construir un liderazgo político. AMLO movilizó a la vez creencias y memorias compartidas por la población ; y construyó marcos de comprensión de la realidad, basados en estas. A tal punto que en el 2006 después de la elección, había en el espacio público 2 maneras que polarizaban la comprensión de la realidad ; una de ellas, la propuesta por AMLO y explicada someramente en el presente artículo.
i Para una reflexión amplia sobre el tema referirse a Grayson.
ii Protección que las leyes mexicanas otorgan a los funcionarios electos.
iii Para una reflexión amplia sobre el tema referirse a Duclos. La traducción es de la autora.
iv [(Duclos), 2010]
v [(Duclos), 2010]
vi Discurso que reivindica los valores de los mestizos e indígenas, su cultura y su forma de vida. Y que por ende en el espacio público se contrapone a los valores importados de Estados Unidos y a la tecnocracia.
Duclos, (A.), 2010, Sociologie de l’inconscient collectif : comment rendre des comptes au sens commun, Revue du Mauss permanente, 6 mai 2010, http://www.journaldumauss.net/spip.php ?article684
Fanon, (F), 1952, Peau noire, masques blancs, Seuil, France.
Grayson, (G.), 2006, Mesías Mexicano, Biografía critica de Andrés Manuel López Obrador, México, Ed. Grijalbo.
Jung, (K.), 1954, Les racines de la conscience, éditions Buchet Chastel, France.
Manin, (B.), 1995, Principes du gouvernement représentatif, Calmann-Lévy, Paris.
Página de internet http://www.gil-conflit.over-blog.org/article-33276780.html